...todo va a estar bien

Recuerdo la primera vez que escuché esa canción, y pensé en que tan acertada podría ser acerca de mí, y tal vez no sólo de mí, sino de muchas otras personas que se sienten de la misma manera, tal vez fue por eso se convirtio en una de mis rolas preferidas.

La escucho justo ahora, estramboticos gritan a través de mis audífonos “…Todo va a estar bien …” y ciertamente, puedo aún, después de muchos años, sentirme de la misma manera que la primera vez… No me gustan las situaciones fáciles, las prefiero complicadas, no te saben igual, no disfrutas tanto ese “JA!” que exclamas cuando finalmente logras salirte con la tuya, cualquiera que ello sea.

Sólo que hoy, me siento cansada, agobiada, frustrada y aburrida que mis intentos de relación se compliquen al grado de la imposibilidad, sólo quiero sentirme a gusto con alguna persona y que a la vez esa persona esté ahí para mi, hacerla parte de mis sueños y de mis cambios de humor, de mis histerias y de mi más honesto amor, de mis secretos de las cuatro de la mañana porque no pueden esperar a que amanezca, de interminables momentos bajo la lluvia donde sólo se escuche el repiqueteo de las gotas sobre la lamina y ese sonido que producen los wipers al limpiar el parabrisas, de mis promesas y mis sorpresas, de mis mañanas de hot-cakes y noches agazapadas en un sillón.

De mis besos y mis abrazos, todos ellos.